Exfoliante y mascarilla, el dúo esencial

Campeón en la eliminación de las células muertas de la piel, la exfoliación facial es una parte integral del ritual de belleza.

Pero, ¿sabías que debe ir seguida de una máscara? Le explicamos por qué.

El exfoliante facial es un tratamiento esencial que los esteticistas utilizan en el salón, en casi todos los protocolos de tratamiento, justo después del desmaquillado. También es un producto para utilizar en casa, de una a tres veces por semana, según el tipo de piel, y para masajear con movimientos suaves, ya sea en el momento de la aplicación o después de la misma, según la fórmula. En verano, después de las vacaciones, reaviva inmediatamente la luminosidad y unifica el bronceado. En invierno, proporciona a la piel un aspecto más suave y radiante. En primavera, ayuda a afinar la textura de la piel y a dar un cutis más fresco. En resumen, es el producto para el cuidado de la piel que se puede utilizar en casi cualquier época del año.

Sandrine Carliez, formadora internacional de Guinot - Mary Cohr, nos da sus consejos para elegirlo y utilizarlo sabiamente.


El exfoliante, el bello activo de la piel

En un solo gesto, el exfoliante elimina las células muertas y las partículas de la contaminación, y así elimina el velo opaco que puede estancarse en la superficie del rostro. Gracias a ella, la piel recupera toda su luminosidad. También es eficaz para impulsar la microcirculación y promover la renovación celular. También afina la textura de la piel. Por último, al eliminar la capa córnea, favorece la penetración de los principios activos que se aplicarán después en un 30% y, por tanto, los hace aún más eficaces.

Mecánica o enzimática, ¿cuál elegir?

El fregado mecánico es un fregado granular. La acción de las perlas exfoliantes, como el polvo de albaricoque, los granos de granada o las microperlas de jojoba, ayuda a eliminar las células muertas. Este tipo de exfoliante es ideal para las pieles gruesas o grasas. El exfoliante enzimático es un exfoliante sin granos, como el Gentle Foliant con Lily Essences. Con una textura de crema o gel, contiene ingredientes activos, generalmente enzimas o ácidos de frutas, que disuelven las células muertas y las impurezas. Son adecuadas para las pieles sensibles o con tendencia al acné, pero también para las pieles secas por su textura más suave. Tenga en cuenta que algunos exfoliantes, como el Gentle Radiance Scrub, combinan una acción mecánica con una acción enzimática.

¿Qué gesto debo utilizar?

Inspírese en los gestos utilizados en el salón, que son siempre muy suaves. Sobre todo, no frotes ni utilices accesorios abrasivos, especialmente si tu exfoliante contiene partículas exfoliantes, que podrían irritar la piel.
¿Lo correcto? Coloca los pulgares bajo la barbilla y masajea la textura con movimientos lentos, utilizando los dedos índice y corazón, insistiendo en las arrugas o en los lados de la nariz.

¿Por qué usar una mascarilla justo después?

La mascarilla tiene una acción inmediata que se multiplica por diez cuando se hace después del exfoliante. Según la fórmula elegida, la mascarilla proporciona un baño de hidratación, nutrición, regeneración... Es una solución rápida y eficaz después de una noche demasiado corta, un día de frío o de calor, etc. La mascarilla ayuda a reequilibrar las necesidades de la piel. Lo mejor es tener varios en casa, con diferentes beneficios. La Mascarilla Hidrosmosis para hidratar, la Mascarilla Multisensible para calmar, la Mascarilla Nueva Juventud para aportar luminosidad y juventud y la Mascarilla Reparación Instantánea para nutrir intensamente la piel... Con el exfoliante, su acción se multiplica por diez. El consejo Debajo de su mascarilla, deslice un suero que tenga las mismas funciones, su eficacia se verá reforzada.